Participaron el autor del libro Alejandro Carantoña y el director de escena Emilio Sagi, dos asturianos que hablaron de Bilbao, sus gentes y hasta del alcalde Azkuna con gran cariño y emotividad.
Desterraron el mito de la ópera y todo su entorno como algo terrible y desgarrador y nos lo presentaron como amable, simpático, atractivo, cercano, disfrutable y muy profesional (adjetivos todos ellos que pueden aplicarse a este gran director del teatro y de la ópera).¡La de historias que tiene para contar este hombre, la de gente que ha conocido y con la que ha trabajado, los teatros de todo el mundo que le han aclamado y reconocido!.
Y también queremos quedarnos con su respuesta a nuestra pregunta de "¿Qué se necesita para ser un buen director de escena?", "sentido común", para ser director de escena, para ser un buen profesional y también para ser un buen político o gestor cultural.
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